Lo Que No Te Dicen De Los Muertos
No quiero sonar grosero, pero los muertos son
bastante despistados. Siempre los he visto. Cuando era más joven, todos
pensaban que solo estaba hablando con amigos imaginarios. Después de un par de
años, cuando escuché a mi madre discutiendo por el teléfono acerca de llamar a
un psicólogo, entendí con quién había estado hablando en realidad. Verás, los
fantasmas no tienden a darse cuenta de que están muertos, y no se ven como se
ven en las películas; se ven justo como nosotros.
Soy bastante inteligente para ser un niño de trece
años, así que comencé a notar ciertos patrones para diferenciarlos de los
vivos. Pueden ser un poco más aislados que las personas vivas, o puede que los
veas tratando de hablar con personas que ni siquiera los notan. Algunos de
ellos se pueden dar cuenta de que yo soy diferente, de que los noto. Como este
sujeto que vi hoy después de la escuela. Ahora soy un chico grande, y no
necesito que mi madre me venga a recoger. Él estaba parado lejos de los demás
padres; no les hablaba, solo me observaba. Fue así como supe que era un
fantasma. Me le acerqué, le dije que sabía lo que era y le pregunté cómo podía
ayudarlo. No recuerdo mucho después de eso, y creo que fue por lo que comenzó a
suceder horas más tarde.
Cuando llegué a casa, mi madre estaba llorando
en el piso de abajo. Traté de hablarle, pero no me prestó atención. Ella debió
de haber muerto esta mañana, de alguna forma. Es normal que los fantasmas
nuevos no me hablen. Pero ahora han llegado algunos oficiales de policía y
reporteros, y no me hablan tampoco, al igual que mi madre. Es extraño, nunca he
visto a tantos fantasmas reunidos en un mismo lugar. ¿Por qué es que nadie me
habla?
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